Auto-ReceTa


Jorge Torrente
@jorgitorrente
Recurso para Primaria (segundo y tercer ciclo)

Crear una receta para hacer un plato típico que nos guste requiere de unos pasos exactos, unos utensilios adecuados y un tiempo de cocción o reposo necesarios para que esté en su punto. En esta ocasión, lo que queremos crear es a una persona o alumn@ con ciertos ingredientes que le den el toque con la personalidad real del niñ@. Los ingredientes tendrán que estar adecuados a los gustos personales del susodicho. Estos pueden ser inventados, imaginarios, reales o fantásticos.

Lo realmente importante es que el escritor refleje su personalidad, gestos, hábitos, curiosidades o aficiones en los ingredientes. Es una magnífica herramienta para que el alumnado se identifique, plasme una imagen positiva de sí mismo, localice sus virtudes, defectos, forma de ser; que se reconozca ante un texto que puede ser imaginario y real a la vez.

A nivel gramatical, hacer uso del verbo en infinitivo para el proceso, y del orden para introducir ingredientes; vocabulario y sinónimos: echar, verter, añadir, completar, introducir, remover, agitar, reposar, después, a continuación, más tarde, etc.
Una de las motivaciones para hacer este taller, es leer antes el libro de “Konrad, o el niño que salió de una lata de conservas” de Christine Nöstlinger.

EJEMPLO (de Mar, alumna 6º de primaria)

INGREDIENTES

  • Un libro de matemáticas,
  • dos pelos de caballo,
  • un diccionario para no tener faltas,
  • los restos de la pintura de Picasso,
  • la saliva de una persona antiberenjenas,
  • las virutas de haberle sacado punta a un lápiz rojo,
  • un mechón de pelo de una persona antidesorden,
  • un paquete de fresas,
  • los teclados de un ordenador,
  • y un kilo de risitas.

PREPARACIÓN


  1. (Antes de empezar a cocinar es necesario lavarse las manos para que la niña no salga con gérmenes).
  2. Cortar el libro y el diccionario en trocitos muy pequeños, más o menos de cinco centímetros, y echar todo en un bol.
  3. Añadir agua a los papelitos y remover todo hasta que se haya formado un puré espeso.
  4. A continuación añadir el mechón de pelo de una persona antidesorden y los pelos del caballo.
  5. Recomendación: en el caso de que la masa salga con muchos grumos, echar un poco de agua y mezclar bien.
  6. Una vez hecho esto, volcar los restos de la pintura de Picasso para que a la niña le guste pintar. Después añadir las virutas del lápiz rojo y la saliva de una persona antiberenjenas, entonces coger una batidora y remover todo hasta que se haya formado una masa amarillenta.
  7. Importante: ahora es necesario empezar a contar chistes para que la propia masa consiga un kilo de risitas.
  8. Y por último lavar y partir las fresas en trozos muy pequeños y añadirlas a la masa. 
  9. Dejar reposar tres horas, espolvorear con teclas de ordenador, meter al horno durante 20 minutos, y en una noche el bizcocho habrá tomado forma.

1 comentario:

Francho Lafuente dijo...

Me encanta el recurso, dentro del ámbito de la descripción aporta creatividad y diversión. Gracias. Me lo quedo